lunes, 11 de enero de 2016

Ushuaia-Tolhuin(104 km)

La noche no ha sido especialmente buena. Aumentó el temporal de viento y por momentos parecía que se fuese a llevar el techo de la habitación. Mal dormido -Santi parece que durmió mejor después del viaje casi sin pegar ojo- y un poco inquietos por la primera etapa desayunamos y salimos bien abrigados a pedalear. Afortunadamente la dirección del viento parece ser favorable y así será durante la mayor parte del día. Los primeros kilómetros son de ajustes de equipaje y de bicis. Un puesto de policía nos solicita el registro antes de tomar la ruta tres hacia el paso Garibaldi. Ahí comienza lo serio y también lo hermoso. Las montañas que rodean a un antiguo valle glaciar son imponentes y nos parapetan del viento incesante. Por contra el perfil se empina y la cosa se pone seria en los cuatro o cinco kilómetros que preceden al paso Garibaldi. Santi tira de piernas sin problema y o a mi ritmo de pastor comienzo a certificar que mi estado de forma no está a punto: si no hay fuerza toca tirar de paciencia. Coronamos en medio de una tempestad de viento que apenas nos permite unas fotos al recién saludado lago Fagnano. Una bajada prolongada nos llevará a su lado durante más de cincuenta kilómetros. Eso sí que es un lago. Comemos algo en la cuneta y seguimos hasta Tolhuin. Aquí nos dirigimos a la panadería La Unión, conocida por su hospitalidad con los ciclistas y nos ofrecen alojamiento gratuito. Una amabilidad que confirman su  fama. Sebastián nos acompaña a la habitación. Ducha y a comer. Las empanadas están deliciosas y los alfajores...hay los alfajores. Paseito y a descansar que mañana toca más.




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